Hemos querido charlar con Pedro Cortés Barrero, autor de El chico de la barba erizada, para que nos cuente algunos de los secretos de su obra. He aquí la entrevista resultante:
Ediciones Lacre: ¿Qué se va a encontrar el lector en esta obra?
Pedro Cortés Barrero: La obra pone de manifiesto los diferentes niveles de la vida del protagonista, desde una adolescencia anulada hasta un despertar abrupto a la vida adulta lleno de intrigas y emociones.
E.L: ¿Por qué esta obra? ¿Qué te propones con ella?
P.C.B.: La gran preocupación al escribir siempre es el tipo de historia que vas a contar, cómo la vas a contar y cómo la vas a transmitir. Esta novela nació con una vocación juvenil y de pronto se hizo adulta y me pareció que era adecuada para el mundo de hoy y de ayer.
Cuando la escribía, creo que no tenía un propósito concreto. Ahora pienso que puede, además de entretener ayudar a los muchos que de alguna manera u otra se vean reflejados en ella.
E.L.: ¿Qué recomendarías al lector antes de comenzar a navegar por las páginas de esta obra?
P.C.B.: La novela es de lectura fácil y sigue los pasos de la evolución del protagonista, pero no está exenta de reflexión. Mi única recomendación es comenzar la lectura.
E.L: ¿Cómo surgió la idea de escribir este libro?
P.C.B.: Es difícil de decidir en qué momento aparece la necesidad de escribir sobre algo. Creo que es más fruto de vivencias y pensamientos que se van acumulando. Pero si he de escoger un momento, diría que la idea surgió en medio de la escritura de otra novela totalmente diferente, pero en la que aparecía un personaje con algunos rasgos comunes.
E.L: ¿Dónde te has inspirado para escribir esta obra?
P.C.B.: El lugar y el tiempo siempre son importantes en una obra. Esta no tiene lugar concreto, pero sin duda hace referencia al tiempo actual en cualquier ciudad de gran tamaño. Donde las vidas se unen y se separan por zonas y el azar o vete a saber qué, rompe por momentos las barreras que las separan.
E.L: ¿Qué método utilizas a la hora de escribir?
P.C.B.: Actualmente están muy de moda las escaletas con el argumento, las plantillas con la trama y otros recursos que ayudan a la planificación de la escritura y en la que escribo ahora me esfuerzo por utilizarlas. Me cuesta horrores eliminar cosas que he escrito aunque intuya que no encajan con el argumento. La verdad es que odio y admiro a Orson Welles cuando decía aquello de: «hay que ser valiente y prescindir de una secuencia que te ha costado rodar un montón y ha quedado perfecta, pero que no encaja en el montaje.»
E.L.: ¿Qué reglas sigues para escribir una obra como esta?
P.C.B.: La regla o método que he seguido en la escritura de El chico de la barba erizada, ha sido muy simple. Cada día escribía un número determinado de palabras, al día siguiente lo revisaba, eliminaba o completaba y continuaba donde lo había dejado.
E.L: Valora brevemente Lacre Ediciones.
P.C.B.: Ha sido un placer trabajar con vosotros. Me ha encantado vuestra disposición y profesionalidad y espero poder continuar algún día con algún otro libro.