Azotes de nuestro tiempo, de Max Romano, está llamando la atención. Por todo: por lo que cuenta, por cómo lo cuenta y por la actualidad de lo que cuenta. Se podrá estar a favor o en contra de sus opiniones, pero lo que no se puede negar es su valentía a la hora de expresar dichas opiniones. Por eso le hemos pedido que nos cuente más al respecto de aquella obra. Y te merecerá la pena leer las líneas que siguen.
Max Romano no tiene pelos en la lengua. Puedes comprobarlo en su blog, pero también en esta obra, Azotes de nuestro tiempo, que no está dejando a nadie indiferente. Y le hemos pedido que nos cuente más al respecto de ella. Esas curiosidades que tanto te gustan, que te llaman la atención. Estamos convencidos que las siguientes líneas las vas a leer con mucha atención:
Este libro es básicamente una crítica al tipo de sociedad que ha ido tomando forma en los últimos decenios, especialmente en Occidente. Se atacan los valores, costumbres, ideas, tipos humanos y puntos de vista hoy dominantes, que son identificados separadamente y considerados Azotes de nuestro tiempo. Por tanto, no es un tratado ni una exposición sistemática sino una especie de galería fotográfica donde se toman instantáneas de actualidad.
Para hacerse una idea, algunos de los Azotes son: Calidad De vida, Turismo de masas, Consumismo, Depresión posvacacional, Cirugía estética Asistencia psicológica, Telebasura, Autoayuda, Pedagogía progresista, Estúpidos, Corrección política, Solidaridad, Vulgaridad, Igualdad de género, Discriminación positiva, Feminismo, Papás del Siglo XXI, Ideología de género, Fealdad, Emancipación, Igualitarismo.
He querido dar una estructura particular a la obra, acompañando cada Azote con una pequeña reflexión propia llamada Aforismo del Oso y con una cita tomada de otro autor, generalmente bastante conocido. Asimismo, muchos Azotes llevan una selección de noticias comentadas llamada El pulso de la sociedad que normalmente se refiere a España, pero no siempre. Finalmente hay treinta ilustraciones que son una parte integrante de la obra, capturan la esencia de las cosas y condensan, en una sola imagen, todo el contenido del texto sucesivo. Debo decir que el ilustrador, Javier Rivas, ha hecho un excelente trabajo, y ha sabido interpretar siempre acertadamente lo que he querido decir.
Ha sido necesario un trabajo de años para llegar a terminar el libro por culpa de mi poca constancia, y también porque nunca estoy contento hasta haber revisado varias veces las cosas. Incluso me he retirado cuatro días lejos de todo y de todos para concentrarme en la revisión final. Pero finalmente he conseguido dar una forma a muchas de las reflexiones que han surgido a lo largo de los años, y que he comenzado a poner por escrito en mi página El blog del oso solitario —de aquí, por cierto, lo de Aforismos del Oso—. Y es que el blog me ha dado la idea de partida para esta obra, pues allí he comenzado la serie de los Azotes en una primera versión que luego he desarrollado, además de completarla hasta llegar a los 68 capítulos que forman el libro. En el blog he dejado algunos párrafos de muestra de estos primeros textos que pueden dar una idea del estilo y el contenido.